Señala que la primera fiesta que tienen los judíos con levadura y con alimentos fermentadas es la comida de la Recordación. Después del décimo día de esta fiesta, viene la segunda y es la Redención, todos beben del jugo de la uva, dice y luego continúa: “Esta comida de la Redención debe ser con levaduras y fermentadas”.
Menciona que la tercera comida de ese mismo mes, sin darle la importancia al Señor Jesús, asumen sin conocimiento del Mesías que llegaba a sus tierras, la tercera fiesta, la más grande y pomposa y la más llena de doctrinas judías, es la tercera festividad de la Salvación. Jesús como judío celebró con los apóstoles la comida de la reconciliación y la redención.
Pero en la cuarta comida, Él no participa, aquí tenemos una clave que muchos ignoran en todo el mundo pero Dios me da la oportunidad de traerles esta verdad. Leamos Lucas 22: 17-18: Y habiendo tomado la copa, dio gracias, y dijo: Tomad esto, y repartidlo entre vosotros; porque os digo que no beberé más del fruto de la vid, hasta que el reino de Dios venga.
Dios dijo que todos hemos sido sanados. Es bueno que cuando reciban la sanidad digan Amén y puedan confesarlo. La presencia del Todopoderoso está hoy aquí. Les hago una pregunta a ustedes ¿Tienen hambre de Dios?… Si la iglesia tiene hambre de Dios, Él derramará su misericordia sobre nosotros.
La iglesia tuvo un buen aperitivo de conocimiento sobre las cuatro copas: la 1ra. Recordación; 2da. Redención; 3ra. Salvación y 4ta. Mesías. No es lo mismo el conocimiento de una iglesia en el espíritu que una iglesia en la letra.
ESPIRITUALES Y DE LETRA
Los pastores que son del espíritu tienen que trabajar y entregar más y los que son de la letra, estudian, abren la Biblia y predican. Pero los que somos del espíritu a veces pasamos dos o tres días preparando nuestro espíritu para poder ser ministradores de su espíritu.
Hoy es una iglesia limpia de pecados porque Cristo así lo instituyó, que por su sangre su pueblo es lavado y limpio. Aunque nosotros nos acordamos de nuestros pecados, el Señor los borra para siempre en el instante que te perdonó. Esa es la misericordia de Dios. La sangre redime por misericordia y cancela el pecado. El pecado es astuto pero más sabio es el Espíritu.
LA MISERICORDIA DEL SEÑOR
El carácter del Señor es misericordia, cuando vamos al Padre no vamos a un padre herido, tampoco me va a dar con el látigo por mis pecados. Yo se que Él está lleno de misericordia para mí. Al no tener la característica de misericordia del padre, se mantienen retazos del pecado, más aún si se guarda el pecado del rencor, volverás a tropezar con ese pecado.
Una cosa si sé de las características del Padre, es que aborrece el pecado. Hoy están lavados con la sangre del Cordero pero se cuidan allá afuera porque la serpiente está lista para hacerlos caer de nuevo.
TERCERA y CUARTA COPA
La salvación es la tercera copa. Jesucristo participa de ella con sus discípulos. Cuando un alma se salva es una fiesta de salvación. Cuando traes a tu hijo a la iglesia, es una fiesta, es aquí donde debe estar. Después de esto tenemos toda una vida para festejar porque nos sacó de Egipto.
Hoy tomé de la cuarta copa: Mesías, y sé que voy a beberla con Él en el reino espiritual y si, voy a las bodas, yo soy la novia y Él es el novio. La iglesia tiene que esperar a su novio para que cuando Él venga nos llene la copa.
Nota: Esta Crónica se hizo posible gracias a la colaboración de todo el Departamento de Comunicaciones de MEBPI: Efraín Montesino, Alfredo Molero, Ramiro Cornejo, Francisco Martínez, Antonio Rodríguez, Héctor Asencio. Fotos: Peter Zuniga y Alexis Gutierrez.
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